viernes, 15 de enero de 2010

Escritos de fuego N° 4: XMAS LIGHTS (post – 23)

He pasado largo rato recostado en la cama de este cuarto de hotel, mirando el blanquecino techo sobre mis hombros. Hace ya una semana que estoy aquí, el frió de las tardes después de unos cuantos días ya no lo es tanto y el bochorno natural de las mañanas ya no afecta mi rostro como lo hacia al llegar. Esta bien, uno llega a acostumbrarse. Nos adaptamos. Pero, qué pasa si me apetece un café al atardecer o un poco de helado para el desayuno ¿Seria igual de placentero?

Estos días he podido dormir agradecidamente bien, es tan raro dormir asi para mí que me he levantado con algo parecido al buen humor en el rostro. Sonrió y pienso: <> Cierro la puerta de la habitación y bajo las escaleras con ligera premura, quizá tengo prisa por comer, quizá quiero ver como aquellas plantas, como todas los días, permanecen en el mismo rincón mientras la gente los ignora al pasar, quizá deseo tomar una copa de vino y pensar en algunas frases que no me atreveré a decir mientras escucho en una vieja radio una canción sin tristeza; quizá solo tengo ganas de hacer algo diferente , quizá solo quiera hacer lo mismo pero de otra manera. No importa, guardaré algo de calor y frío para el resto del día.

Hoy será Navidad y el frío rompió temprano, por un momento quise que nevara. Hubiera sido divertida una mañana de nieve, mas en este lado del mundo la nieve es inusual. Hoy será navidad y todo esta apunto de ser preparado, los adornos y los arreglos en el árbol esperan a que la cena este en la mesa para completar el perfecto cuadro navideño. Las familias y las personas que se llaman familia se reunirán a esperar la medianoche mientras que los niños intentarán no dormir. Yo, escribo algunas líneas a escondidas mientras camino alrededor, camino por las calles contemplando las luces de la cuidad, las luces de Navidad. Camino lentamente por el boulevard, el frío y el calor que guarde se logran fusionar en el aire con los destellos que vienen de cada casa y cada tienda que me ve pasar; la gente alrededor se vuelve más nítida, más importante permitiéndome levantar la mirada, ver al cielo y buscar mis estrellas, aquellas que me gustaba buscar cuando era niño creyendo que me congelaría si algún día tocaba una, creía que las luces de la ciudad eran un regalo de las estrellas y que solo en este día ellas podían cambiar de color y bajo estas luces de Navidad (And down this Xmas lights…) bajo esta estrella fugaz escuchaba el crepitar de múltiples estruendos que desaparecían al sonar como por arte de magia, como solo un niño podría soñar. Que tan difícil es para las luces de Navidad brillar cada año con más intensidad, ¿Cuán alejados están los regalos del árbol de ser lo que en verdad la gente necesita?

Cuantos deseos de Navidad (Xmas whishes) podría cumplir, en mi y en otros… si todas las personas que he conocido se presentaran ante mi, las que conocí y olvide, las que encontré y no volví a llamar, a las que quiero y puedo ver, a las que quiero y no están, a las que aún no termino de conocer, a las que conoceré… sería capaz de cumplirles un deseo. Si en este preciso momento pudiera sentir como nuevas todas las cosas; si tuviera alrededor a todas las personas de mi vida; si pudiera envolver mi pasado, mi presente y mi futuro; si pudiera caminar un poco más bajo la luz de la ciudad… quizá un deseo de Navidad nos sería suficiente, para que todas las cosas que nos solían gustar nos gusten cada día más.

Nota a pie de página 1: Unos cuantos días tarde, pero aqui esta. Muchas ideas pareceran confusas o sin conexión pero estan tal cual las fui pensando, tal vez aún sigo complicando los post. para nivelar eso viene un post más "sin-serios".


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